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domingo, 9 de septiembre de 2018

"Una columna de fuego", Ken Follett

Al fin estamos de vuelta con un nuevo post! Esta vez, para hablar de "Una columna de fuego", el cierre de la saga de Ken Follett iniciada con "Los pilares de la Tierra". Un novelón, figurada y literalmente! Sus 935 páginas se han alargado mucho pero no nos han decepcionado. ¡Cómo podría hacerlo!

Valoración: Es un broche digno a las historias de las dos novelas que le preceden. Una vuelta al lenguaje y el estilo con que el autor nos hipnotizó al principio de todo. 
Te gustará si...: Te gusta el puro estilo Ken Follett. Clase de historia con personajes icónicos.
No te gustará si...: Te abruman las historias con muchos personajes y mucho movimiento.

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Algunos fragmentos que me han gustado:

"Los días que siguieron al funeral, a Ned le dio por pensar en el momento en que se reuniría con su Creador, y se preguntó si se sentiría orgulloso de la vida que había llevado. Se había dedicado en cuerpo y alma a una visión que compartía con la reina Isabel, la de una Inglaterra donde nadie muriese por su fe. ¿Podría decir que había hecho todo lo posible por defender ese ideal?"

"-Si muero antes que Ned, y Bart muere antes que tú, deberías casarte con él.
-¿Cómo puedes decir tal cosa?
-Os estaré mirando desde el Cielo y bendeciré vuestra unión.
-Eso no va a suceder... pero gracias por decirlo. Eres una buena mujer.
-Tú también lo eres. -Sylvie sonrió-. ¿Verdad que tiene suerte?
-¿Ned?
-Por recibir el amor de ambas.
-No lo sé -dijo Margery-. ¿Eso crees?"

"Ned reflexionó entonces que las tres grandes mujeres del siglo XVI ya estaban muertas: Isabel, la reina Catalina de Francia y Margarita de Parma, gobernadora de los Países Bajos. Todas ellas habían intentado impedir que los hombres se mataran entre sí por su religión. Echando la vista atrás, le pareció que sus logros habían sido lamentablemente limitados. Personajes malvados siempre habían frustrado los denuedos de quien buscaban la paz. Las sangrientas guerras de religión habían arreciado en Francia y en los Países Bajos durante décadas. Solo Inglaterra se había mantenido más o menos en paz."